Situación crítica

Todos hemos quedado atónitos ante el bochornoso espectáculo que ha dado el PSOE. Y es que es muy probable que Pedro Sánchez no fuera el mejor candidato que pudiese liderar el partido, pero, una vez llega al cargo de secretario general, se le debería haber dado el máximo apoyo para intentar liderar una alternativa al PP. Además, la principal pérdida de votos se produjo, a diferencia de lo que muchos creen, cuando el PSOE estaba dirigido por Zapatero y Rubalcaba. 

Miembros históricos y numerosos representantes territoriales han decido destruir su propio partido haciendo una actuación lamentable. Es obvio que están en su derecho de opinar, pero en vez de lanzar mensajes al aire deberían haberse reunido todos (antes del congreso que desmontaría completamente el partido) para decidir la postura del partido. Pero pongámonos en la posición de los detractores de Sánchez. Si su intención fuera crear una formación más fuerte, sería comprensible, pero su postura consiste en dejar de luchar por una alternativa y regalarle el gobierno al PP. ¿Y ahora que se han deshecho de Sánchez? Pues siguen discrepando y con poca expectativa de un acuerdo, ya que hasta se baraja romper la disciplina de voto.

Es triste que el que probablemente haya sido el partido más importante durante estos primeros años de democracia se derrumbe por una pugna por el poder. El referente del centro-izquierda ahora no está muy claro, por lo que la opción más probable es que el PSOE se decante por la "abstención técnica" porque en unas hipotéticas terceras elecciones todo apunta a que Unidos Podemos conseguiría rescatar un buen puñado de votos, y esto es algo que el Partido Socialista no consentiría de ninguna manera. Ahora la más que añorada por muchos opción de un posible gobierno de izquierdas se desvanece entre las discrepancias. A diferencia de lo que defienden prácticamente la totalidad de los políticos creo que lo mejor para España es que se volviesen a repetir las elecciones. El panorama ha cambiado completamente y la gente debería tener la posibilidad de replantearse su voto. Lo que de ninguna manera se puede aceptar son otros cuatro años de gobierno del PP con los recortes y la más que segura destrucción de los derechos que esto conllevaría.